"Aquel que tenga ojos para ver y oídos para oír se convencerá de que los mortales no pueden guardar ningún secreto. Aquel cuyos labios callan, se delata con la punta de los dedos; el secreto quiere salirsele por todos los poros".
Sigmund Freud
¿Cómo no amarte, madre, si me enseñaste a hablar tu lengua? ¿Si soy viento nacido de tu roca?
Gonzalo Rojas
Ciertos libros parecen haber sido escritos no para aprender de ellos sino para que se reconozca lo que sabía su autor.
Goethe